Esta historia nace del compromiso con la lucha por trascender con las propias ideas, un camino trazado de necesidades  personales, para  encontrar  una razón de ser en el mundo.
 
Ricardo es el protagonista de esta historia. Él ha llevado una especie de doble vida, una es la de padre responsable y activo en la sociedad, buscando la mejor forma de enfrentarse a la cotidianidad. La otra es la de músico apasionado por el metal, en la continua práctica de la guitarra, descubriendo alguna forma de ponerle el cuerpo al tiempo, para sacarle provecho al quehacer  y al enriquecimiento personal.
 
Ricardo, además de ser un excelente peluquero hace 15 años, es un amante de la música y guitarrista de una banda de trash metal llamada Athor. Su orgullo por tener un doble perfil  lo hace merecedor de una historia peluda para ser escuchada.